miércoles, 4 de noviembre de 2009

Viajar - por Guido Ferro

Gracias Guido por tu excelente descripcion de lo que se hace y lo que se siente al viajar... a ver si podemos convencer a alguno mas de pegarse ena vueltita... seras vos?


Viajar es experimentar,

es estar abierto al imprevisto, a lo espontáneo, a todo lo que ese lugar específico que visitamos tenga para ofrecer. Es evitar lo planeado, lo esperable, la comodidad, el placer banal, el espejismo de aventura.

Viajar implica suspender nuestras expectativas y ahogar nuestros prejuicios sobre las personas y situaciones que allí encontraremos. Supone una mente y un alma abiertas a la riqueza de lo diferente y de lo hermoso de poder compartirlo.

Viajar demanda no quedarse con lo supuestamente bello, sino que exige enfocar todos nuestros sentidos en los distintos aspectos de la realidad, para buscar la belleza en cada uno de ellos, en especial en donde usualmente no lo hacemos.

Viajar ofrece la oportunidad para encontrarse con uno mismo. Permite, una vez abstraido de la rutina, poder pensar sobre la dirección que le hemos dado a nuestra vida. Sobre nosotros mismos, sobre quiénes somos realmente.

Viajar llama a encontrarse con el otro. A descubrir en distintas costumbres y culturas la misma esencia que nos hermana como seres humanos, al mismo tiempo celebrando la diversidad. A tirar abajo barreras de miedos e ignorancia que construimos para no afrontar nuestras propias flaquezas.

Viajar abre la mente a nuevas formas de concebir el mundo y la vida. Nos enfrenta a realidades y experiencias humanas distintas a las nuestras. Nos da una nueva visión sobre nuestra herencia socio-cultural, sobre nuestro origen, a partir de la cual podemos valorar más los aspectos positivos y corregir los hábitos y costumbres dañinos.

Viajar permite contemplar el milagro de la vida en la naturaleza. Montañas, ríos, desiertos, bosques, mares, selvas. Son nuestro más preciado tesoro, y nuestra mayor responsabilidad. Admirarlos y cuidarlos es derecho y deber de toda la humanidad.

Viajar da la posibilidad de entender mejor al hombre. De contemplar la huella que ha dejado en el mundo, sus grandezas y sus miserias, sus maravillas y sus horrores, su genio y su ignorancia, su riqueza y su injusticia.

Viajar es una actitud que no admite la indiferencia.